Sol amanecido

El sentido que ahora encuentran mis sentimientos, van de la mano de una pantalla pequeña con teclado.

Son casi las cinco y media de la mañana, me encuentro frente a un mar que todavía se torna gris, las luces aún no duermen, y yo no hago más que escribir.

Junto a un vino que me hace sentir una soledad extraña, ahora en mi vida solo veo colores que se tiñen a expectativas, veo junto a mí una hamaca, una botella de vino, pinceles, tinta, cartulina, lienzo, una cama distendida, el sonido del mar, la brisa de esta playa.

Me sorprende la idea de estar sola en medio de tantas cosas, de no querer hablar con nadie, de querer escribir y nada más que escribir, de entrar a la red y solo buscar mi correo, lecturas y la pagina principal del blogger, de llevar la tecnología a un viaje de serenidades. Y de ver, sentir, pensar y analizar mi vida a un punto que tengo que sentirlas en letras para recordarlas y saber con exactitud por donde andaba.

La tranquilidad va siendo mi compañera.

Las letras mis aliadas

Y la pintura mi complemento

Ahora me voy a esperar el amanecer

Me espera con un ceviche de emociones.