jueves, 21 de octubre de 2010

Palmeras blancas

Creo que la soledad es traicionera, y si bien hace falta las necesidades, abunda el sentimiento solitario de la dulce espera.
Creo firmemente en mis equivocaciones, y que esta necesidad que a veces aparece como el viento, de esta intensidad que se transforma en tiempo, de este frío envolvente al tiempo presente, de todas estas palabrerias que hoy han hecho que me sienta un poco sola.
No busco rimar ni dibujar palabras bonitas, solo busco escribir en este espacio que tengo, sentada en ciudad extranjera, rodeada de palmeras, una luna hermosa, un río, una pileta sin usa, un aglomerado de bares, restaurantes, vineras y dulcerias de una elite superior,todos plasmados de blanco y alto linaje, yo aquí, después de realizar una llamada que me lo dijo todo, algo mal y decepcionada, tratando de descubrir si viene de mi o de quien espero un detalle. Pues no lo se y espero descubrirlo. Hoy burgo en el presente, y quedo estática en este mismo mundo dibujado.
Y es que todo casi todo va a la perfección, tengo un trabajo bendecido, donde aplico todo lo que he querido y es orgullo motivacional, tengo una familia adorable, un entorno agradable, un corazón fortalecido.
Pero aun asi algo falta, algo grande que necesito y creo que po la soledad ando encontrando sin que se entere que ando.
He sentido un importante negativo interés, y llena mis minutos de desespero.
He tenido todo lo que he deseado.
Y solo ahora añoro esto que quiero. Por que somos tan insatisfechos?
No quiero vivir sin este amor para dar.